Andrés Repetto, gerente de Operaciones de TPS repasa junto a Trans-Port, los principales desafíos del terminal portuario a más de 20 años de funcionamiento en apoyo al comercio exterior chileno. En un contexto donde las empresas han avanzado en la profundización de sus políticas internas de equidad de género, ¿cómo se valora dentro de TPSV este tipo de iniciativas y si forma parte de su estrategia de sostenibilidad empresarial? En TPS, la sostenibilidad ha sido la base del crecimiento a lo largo de nuestros más de 20 años de concesión. Sabemos que somos una pieza fundamental de la cadena logística del comercio exterior y estamos conscientes de la responsabilidad que nos compete en el desarrollo de este sector tan relevante para la economía del país. Cuando hablamos de un desarrollo sostenible, una empresa diversa es un factor clave; por lo tanto, abordar aspectos de equidad de género esta dentro de nuestros focos. En el caso de TPS, alrededor del 15% de nuestra dotación son mujeres, proporción que destaca frente al 2% de mujeres que trabajan en el sector marítimo portuario a nivel mundial, de acuerdo con las cifras de la Organización Marítima Internacional (OMI); y nuestro compromiso es continuar en esa alinea, asegurando siempre que nuestros procesos de selección permiten desde su origen la diversidad en la postulación. Actualmente TPS cuenta con un equipo ejecutivo equilibrado en términos de género, con mujeres en roles de gerencias y jefaturas. Otro aspecto relevante desde la perspectiva general de equidad, es que en TPS no existe brecha salarial entre hombres y mujeres, dado que las remuneraciones están establecidas en función del cargo que cada persona desempeña. ¿Qué tipo de prácticas laborales ha identificado TPSV como parte de su proceso de modernización, y que rol cumplen en aspectos tales como la mejora continua de las operaciones, la seguridad y la transformación digital? TPS es un terminal acotado en términos de espacio e inserto en el corazón de Valparaíso, por lo tanto, ambas características nos desafían constantemente a mantener la búsqueda de soluciones en innovación y tecnología para mejorar su eficiencia. En ese contexto siempre estamos en un proceso de mejora continua, modernizando tanto nuestros procesos como equipos, lo que resulta en aumento de, seguridad, calidad, eficiencia y productividad. Todos los cambios presentan desafíos y, como los procedimientos son llevados a cabo por personas, un paso fundamental es acercarlas y familiarizarlas mediante la realización de pruebas y marchas blancas antes de lanzar los sistemas de producción. Gran parte de las nuevas tecnologías que hemos implementado atienden a oportunidades de mejora asociados a procesos manuales. Cuando una tecnología resuelve un problema que era frecuente para una persona, la recepción de esa tecnología es positiva. Por otra parte, la pandemia significó adaptar prácticamente todos los procesos de nuestra actividad, lo que logramos con éxito gracias al compromiso de nuestros colaboradores, que asumieron desde el primer momento la misión de seguir trabajando para que el país pudiera seguir su funcionamiento. Nuestra mayor satisfacción, en este sentido, es haber podido brindar a nuestros trabajadores todo lo que está a nuestro alcance para resguardar su salud. Sin duda, la seguridad de las personas y de la operación fue el gran eje en torno al cual todas nuestras actividades giraron a lo largo de la pandemia. Como se trata de uno de los pilares de nuestra cultura, esto significó reforzar los programas que veníamos trabajando desde hace un tiempo con nuestros colaboradores, empresas que son parte de la operación y contratistas; como también implementar proyectos nuevos, con una visión integral que abarca el cuidado de la salud de todas las personas, el cuidado del medio ambiente y la prevención de los accidentes. La pandemia también ha acelerado la digitalización de las labores ejecutivas, ya que nos ha llevado a interactuar en reuniones digitales y a tener conversaciones sobre pizarrones o aplicaciones digitales, lo que ha funcionado muy bien. Asimismo, en TPS nos gusta digitalizar y desarrollar softwares y aplicaciones para resolver nuestros problemas y todavía hay muchas oportunidades de profundizar la digitalización en aquellos procesos que requieren de digitación, entendiendo por esto, los procesos manuales que se complejizan con el aumento de los volúmenes de carga. TPS 20 años en terminal 1 Terminal Pacífico Sur Valparaíso, TPS, es una empresa relativamente joven pero con mucha experiencia, gracias a la trayectoria de Ultramar y sobre todo a las capacidades y profesionalismo de todas las personas que trabajan en el Terminal. En 2020 cumplimos 20 años como concesionarios del Terminal 1 del puerto de Valparaíso, el cual a su vez es administrado por la Empresa Portuaria Valparaíso (EPV), que pertenece al Sistema de Empresas Públicas (SEP). En estos 20 años, hemos movilizado más carga que en toda la historia de Valparaíso, que por siglos ha sido el principal puerto del país. Nuestro contrato de concesión, que se extiende hasta el 31 de diciembre de 2029, considera la explotación y administración del Terminal 1, diseñado para recibir naves portacontenedores y multipropósito, además de naves de pasajeros. Contribuir a la calidad de vida de las personas a través del comercio exterior, de manera sostenible y con excelencia operacional. El área de TPS es de aproximadamente 15 hectáreas, lo que en comparación con otros terminales portuarios del mundo es una superficie pequeña; pero somos grandes en eficiencia, ya que movilizamos mucha carga en relación al área con que contamos. El Terminal cuenta con áreas operativas como son el Frente de Atraque, el patio donde se almacena la carga, los Gates o accesos, etc.; y áreas administrativas, donde se encuentran las oficinas. TPS cuenta con varios accesos para las distintas funciones. Además, existe una oficina de TPS en la Zona de Extensión de Apoyo Logístico (ZEAL) en la parte alta de la ciudad. Los servicios que entrega TPS se dividen principalmente en servicios a las naves y servicios a la carga.